Una larga noche

Parece mentira que desde el 2 de abril no haya vuelto a escribir nada… desconexión total (bueno casi), algo os leo la verdad pero ni tiempo de comentar tengo…

No llevamos muy buena racha en casa. Mi madre ha tenido dos ingresos en menos de dos meses. Del último le dieron el alta hace dos viernes y justo el domingo se cayó mi abuelo y se rompió la cadera (bueno parece que fue al revés, se rompió la cadera y por eso se cayó). En un principio nos dijeron en el hospital que no estaba partida pero viendo que el dolor iba a peor volvimos en unos días y resulta que sí, que estaba partida y lo han tenido que operar. Hoy le han dado el alta, la operación salió bien pero aún sigue teniendo mucho dolor y anda muy poco.

Desde junio no paran de pasar cosas en casa, a veces me da miedo eso que dicen que cuando viene una mala racha viene de verdad. Yo necesito que pare ya, que empecemos a remontar un poco. Los dos ingresos de mi madre han sido complicados y esa sensación de miedo que ya creía olvidada vuelve a mí como un jarro de agua helada… parece que ya está mejor y espero que siga así por mucho más tiempo.

Yo no sé cómo estoy, creo que me muevo automáticamente porque no queda otra, pero me da la sensación que todo esto me viene muy grande…

Sé que igual no es la entrada que esperabais, pero estoy aquí en la habitación de mi abuelo velando su sueño y esperando que las pastillas hagan efecto y no lo pase tan mal. Ojalá pronto se recupere del todo y también recupere parte del ánimo que ha perdido. Ojalá pronto tenga mejores noticias que contar, ojalá pronto pueda decir que mi madre está ya mejor del todo, ojalá pronto no sean tantos deseos y sean más realidades. Ojalá pronto tenga un poco tregua para respirar.

Gracias por escuchar desde el otro lado. Siempre ayuda volver por aquí.